Sillín de segunda mano o nuevo

Porqué NO Deberías Comprar un SILLÍN de SEGUNDA MANO

Aunque la respuesta sea obvia, en este post te vamos a explicar las razones por las que NO deberías comprar un sillín de segunda mano. Puede haber ciertas situaciones en las que puede que esta no sea una decisión errónea, pero en la mayoría de ocasiones si que lo es.

Comprar un Sillín de Segunda Mano BARATO

«¡Si, pero en segunda mano puedo encontrar un sillín tope gama muy barato!». Puede darse el caso, pero, ¿el precio va a influir en como de cómodo que vas a pedalear? A la hora de comprar un sillín el precio es algo que tiene que ser secundario, lo primero tiene que ser que este sea de calidad y adecuado para nuestras necesidades.

Comprar un sillín en segunda mano, a la larga no te va a resultar más barato. Ya que seguramente, ese sillín o te producirá molestias o lo tendrás que cambiar por el desgaste, por lo que al fin al cabo, te tendrás que comprar otro sillín nuevo.

El Mayor PROBLEMA de los Sillines de Segunda Mano

Sillín de segunda mano o nuevo

Puede que te compres un mallot o unas gafas en segunda mano, o incluso una bici. Aunque estén usados, si los tienes bien de tamaño, pueden ser ideales para ti. Entonces si la anchura de mis isquiones es de 140mm, practico ciclismo de carretera, y tengo problemas en la zona perineal, entro en Wallapop o Milanuncios y me compro un sillín antiprostático, de segunda mano, para bicicleta de carretera. Sencillo no? Y encima me ahorro unos euritos…

Pues esto puede ser una decisión muy equivocada. Aunque encontremos el sillín que cumpla a la perfección los requisitos que necesitamos, el hecho de que esté usado, ocasiona en la mayoría de casos incomodidades y molestias en los ciclistas.

¿Alguna vez te has puesto unas zapatillas de alguien, que tenga la misma talla que tú? Las deberías de tener bien ya que tenéis la misma talla, ¿no? ¿Y porque no las tienes bien? Porqué su pie es diferente a la tuya. La forma en la que camina y apoya su pie no es igual que el tuyo, y esto hace que la plantilla y la zapatilla en sí, se deformen y cojan la forma del pie del quien las usa.

Esas mismas zapatillas cuando las compró en la tienda, las tendríais bien tanto el como tú, pero después de un periodo de uso, esa zapatilla únicamente le va bien a él, porque se ha adaptado a su forma de pie. Si se hubiese comprado una camiseta o un jersey, aunque lo usase a diario, esa prenda no se adaptaría a la forma de su cuerpo, por lo que si tuvieses la misma talla, te quedaría bien a ti también.

El ejemplo que hemos puesto de las zapatillas, sucede lo exactamente lo mismo con los sillines. Cada ciclista tiene su anchura de huesos, su manera de pedalear, sus dismetrías, su diferencia de fuerzas entre las piernas, sus movimientos al pedalear… Y todo esto hace que un sillín usado por alguien, no sea adecuado para otro, sino que puede ser hasta perjudicial.

Consecuencias

Reducción del acolchado

Con el tiempo, el acolchado de un sillín usado, se va reduciendo en altura y adaptándose a la forma de apoyo del ciclista. Un problema típico suele ser que un ciclista cambia el mismo sillín que tenía antes, por uno nuevo, que es exactamente igual, y le parece que va más alto, sin haber cambiado en ningún momento la altura del sillín.

Esto sucede porque el sillín viejo tiene reducido el acolchado, bajando la altura de apoyo del ciclista unos milímetros. En las siguientes imágenes podéis ver un ejemplo, donde la parte trasera se encuentra ligeramente hundida respecto a la primera imagen. Pulsando el botón se cambian las imágenes, para apreciar mejor el cambio, ya que puede no ser apreciable a primera vista:

Acolchado de sillín nuevo
Acolchado de sillín de segunda mano

Deformación del sillín

Por otro lado, esta la deformación. Un sillín de segunda mano, en las partes que más se apoyaba el ciclista, tendrá esas zonas más hundidas. Por lo que alguien que compre ese producto, al ponerlo en su bicicleta, el sillín mismo, le llevará a hacía las zonas mencionadas y a la posición del ciclista que lo usaba anteriormente. Esto puede hacer que el ciclista coja una posición inadecuada en la bicicleta y sufra molestias de todo tipo.

Y por último mencionar que no solo se deforman los acolchados de los sillines, sino que también se puede deformar el sillín en sí. Esto sucede en ciclistas que tiene grandes dismetrías y pedalean en una posición torcida durante largo periodos de tiempo. De este modo, puede darse el caso en el que, por ejemplo, un ciclista se compre un sillín para la bicicleta de carretera en segunda mano, (que es la modalidad que más puede afectar este problema al ser un pedaleo más constante) y sin que el tenga ninguna dismetría, el sillín torcido le esté obligando a pedalear en una posición ladeada, pudiéndole causar graves problemas tanto musculares como articulares.

En esta foto podéis ver un sillín muy torcido, que con un simple vistazo se nota que está exageradamente deformado. Sin embargo, aunque en este caso a primera vista se pueda observar una clara deformación, en la mayoría de casos no suele ser tan visible y estos suelen ser los que pueden causar los peores problemas, ya que el deportista no es consciente que esta montando en un sillín deforme.

Sillín de segunda mano deformado

Conclusiones

En conclusión, en casi ningún caso es recomendable comprar un sillín de segunda mano, por muy barato que sea, por muy bien que este… Si está usado, se habrá adaptado al ciclista que lo haya estado usando, y ya no va ser adecuado para tí.

Por lo que únicamente recomendamos comprar en segunda mano, en casos en los que el sillín este apenas usado (menos de un mes) y que esté en perfecto estado. Tampoco te comprarías unas zapatillas que las ha estado usando otro para ir a correr ¿no?, porque no las tendrías cómodas, y te producirían molestias. Pues lo mismo con el sillín.

Busca uno que cumpla los requisitos que necesites y que no este adaptado a nadie más que no seas tú. Este paso te lo hemos puesto sencillo, ya que lo tienes todo explicado en la guía que hemos hecho analizando todos los aspectos a tener en cuenta antes de comprar un sillín.